Como revisamos en la primera parte de este artículo (“Causas de la caída del cabello”), la pérdida de cabello puede deberse a múltiples factores: genética, cambios hormonales, estrés físico y/o psicológico, mala alimentación, entre otros.
En el presente artículo revisaremos los principales cuidados que debes tener con tu pelo para prevenir su caída, así como también, los principales tratamientos médicos que ofrece el mercado, para cubrir las zonas desiertas de cabello, frenar la caída y/o fomentar el crecimiento de cabello nuevo.
Consejos de cuidado para prevenir o disminuir la pérdida de cabello
- Usar el secador de pelo a distancia. Esto, debido a que el uso de los secadores demasiado cerca del cabello pueden generar una agresión térmica, producto de la cual el cabello se reseca y pone quebradizo, propiciando su caída. En caso de ser posible, se sugiere secar el cabello con una toalla, al aire libre o con un secador con aire frío.
- Evitar las dietas hipocalóricas drásticas (dietas para perder peso), ya que pueden causar una significativa deficiencia de nutrientes, vitaminas y minerales, que son esenciales para mantener un cabello sano.
- Evitar peinados que requieran estirar demasiado el cabello, como las colas de caballo.
- Darse automasajes en el cuero cabelludo, ya que al frotarlo con frecuencia se activarán las glándulas sebáceas, lo que favorecerá la circulación de la sangre en las zonas afectadas, propiciando, en consecuencia, el crecimiento del cabello. Se recomienda masajear de manera suave hasta que se comience a sentir calor en la zona.
- Mejorar la alimentación, incorporando a la dieta el consumo de vitamina A, vitaminas del complejo B, vitaminas del grupo E y minerales (zinc, magnesio, ácido linoleico, etc.). En caso de no consumir suficientes vegetales y frutas, ni de tener una alimentación variada, se recomienda el consumo diario de suplementos vitamínicos.
- Controlar el estrés emocional, ya que éste puede incidir en la pérdida de cabello. Se aconseja realizar algún deporte, realizar actividades recreativas y compartir con amigos y familia, para mantener una buena salud mental.
- Evitar fumar, ya que el tabaco reseca la piel y debilita los folículos del cabello. En de fumar, se sugiere tomar abundante agua durante el día (al menos 2 litros).
- Lavar con frecuencia los peines y cualquier otro elemento que esté en contacto con el cabello, ya que pueden acumular sebo (grasa), lo que puede contribuir a su caída.
- Cuidar el cabello en los cambios de estación, para lo cual se sugiere realizar tratamientos capilares que lo mantengan sano e hidratado.
- Evitar el uso excesivo de productos capilares que contengan químicos (por ejemplo, tintes para el cabello) y el uso de planchas, onduladores y secador de pelo.
- Evita el uso prolongado de peinados demasiado tirantes y apretados, como las colas de caballo.
Si bien lo ideal es prevenir, en ocasiones la pérdida de cabello ya ha ocurrido o está ocurriendo. En tales casos, ¿cuáles son los tratamientos médicos disponibles?
A continuación encontrarás una breve descripción de los principales tratamientos que se realizan actualmente.
Tratamientos para la caída del cabello
Es relevante señalar que para abordar este problema es fundamental asistir a un dermatólogo, ya que se debe realizar una historia completa del paciente y un estudio del cuero cabelludo y del cabello. A su vez, también son necesarios los exámenes de sangre para descartar enfermedades o condiciones asociadas. Luego de los pasos anteriores, es posible realizar un diagnóstico e indicar el tratamiento más idóneo, el cual va a depender de la causa asociada a la alopecia.
1) Tratamientos tópicos:
La mayor parte de los tratamientos tópicos para la calvicie únicamente son efectivos para las alopecias androgénicas (*revisar artículo “causas de la caída del cabello” para mayor información acerca de alopecias).
– Uso de Ketoconazol:
Es un agente anti-fúngico (anti hongos) que ha demostrado tener, como efecto secundario, propiedades para estimular el crecimiento del cabello. Esto, debido a que al disminuir los hongos que pueden habitar en el cuero cabelludo (pityrosporum ovale), disminuye el sebo y por ende, la inflamación, lo cual incide en que el cabello se caiga menos y pueda crecer. Se utiliza en forma de champú, el cual se debe dejar en el cuero cabelludo entre 5 y 10 minutos, para luego enjuagar. Se recomienda su uso de 2 a 3 veces por semana. También existen cremas y lociones con Ketoconazol.
– Uso de Minoxidil:
Es un tratamiento para la alopecia androgénica, que ayuda a retrasar la calvicie y potenciar el crecimiento capilar. Se puede encontrar en forma de pulverizador o en forma de espuma. Independientemente de cómo se use, no se deben aplicar más de 25 gotas (1 ml aprox.), las cuales se deben distribuir sobre las zonas afectadas. Para potenciar los resultados, se sugiere aplicarlo 2 veces al día, en intervalos de 8 horas entre una y otra aplicación.
Pese a que el Minoidil combate la alopecia de manera general, es menos útil en la zona de las entradas y más útil en la coronilla. No suele funcionar en áreas de total calvicie, sino más bien donde haya pequeños cabellos.
– Uso de Espironolactona:
La espironolactona es un fármaco diurético que se emplea desde hace más de 30 años en el tratamiento de la hipertensión arterial. Sin embargo, al ingerirlo de manera oral, también actúa como antiandrógeno, al reducir la producción de testosterona y bloquear la acción de andrógenos. Debido a la reducción de testosterona, se emplea como una de las alternativas de tratamiento de la alopecia androgénica en mujeres.
Si bien su consumo de forma oral en hombres puede traer consecuencias indeseables, también se puede aplicar sobre la piel, lo que no generaría efectos secundarios.
– Uso de progesterona:
Es una hormona femenina que, en niveles normales, estimula el crecimiento del cabello, la síntesis de otras hormonas y mejora la libido. Si se aplica sobre la piel, de forma transdermal, estimula el crecimiento capilar y le da un mejor aspecto al cabello.
2) Tratamientos farmacológicos:
– Finasteride:
Si bien en dosis altas se utiliza para bloquear la acción de una hormona que hace que la próstata aumente de tamaño, en dosis menores, sus comprimidos se utilizan para engrosar los cabellos existentes y ralentizar su caída. Puede utilizarse en hombres o en mujeres post menopáusicas, en casos de alopecia androgénica.
– Antiandrogénicos:
Es la alternativa oral para las mujeres con caída pronunciada de cabello. La sustancia más común es la espironolactona, antes mencionada (en los hombres se aplica de forma tópica). También los anticonceptivos orales o terapias con estrógenos pueden ser útiles en caso de presentar problemas hormonales. Estas sustancias se encuentran contraindicadas en mujeres embarazadas.
– Complejos vitamínicos con Biotina y Zinc:
En los casos de caída de cabello por mal nutrición y/o problemas emocionales (estrés, depresión, etc.), se suelen utilizar complejos vitamínicos, con la finalidad de aportar al organismo los micronutrientes necesarios para fortalecer el cabello.
– Los corticoides:
El consumo de corticoides es otra modalidad oral que puede producir recrecimiento del pelo en algunos pacientes. Los corticoides son usados en forma oral en casos de crisis, cuando existe una pérdida de cabello rápida y extensa, utilizándose durante breves períodos de tiempo. Sin embargo, deben sopesarse sus efectos secundarios.
Cabe señalar que los corticoides también son utilizados en algunos tipos de alopecia en forma de inyecciones intralesionales (especialmente en alopecias en parche; por zonas) y también en forma tópica, mediante lociones capilares, según el tipo de caída de la que se trate.
3) Mesoterapia capilar:
Es un tratamiento anticaída del cabello, que consiste en la aplicación de potentes principios activos a través de la piel y directamente en el cuero cabelludo. Éstos se encuentran orientados a estimular la oxigenación y calidad del folículo piloso, con el fin de que éste recobre su normal funcionamiento y produzca más y mejor calidad de cabello.
A su vez, se logra un efecto rápido e intenso, principalmente en: reducir la caída del cabello y mejorar la calidad, brillo, humectación y sedosidad de la piel.
Esta técnica es exitosa en la medida en que se realicen varias sesiones, dependiendo de la cantidad y calidad del cabello. En general, consta de alrededor de 12 sesiones en promedio.
En Dermavida realizamos procedimientos de mesoterapia capilar, por lo que si quieres obtener mayor información o iniciar un tratamiento, no dudes en contactarnos.
4) Fototerapia:
La fototerapia es una terapia de luz, que ayuda a la desinflamación del cuero cabelludo y estimula la circulación de la sangre hacia los folículos pilosos. Esta combinación propicia la regeneración celular necesaria para el crecimiento de un cabello sano y fuerte.
Un tipo de fototerapia es la terapia láser, la cual es una técnica no invasiva que está indicada para hombres y mujeres, en la que se utilizan láseres de baja intensidad. La luz ultravioleta de onda larga (UVA), luego de aplicar o ingerir una sustancia fotosensible, estimula los folículos del cuero cabelludo, ayudando a disminuir los efectos de la proteína que bloquea las enzimas Dihidrotestosterona (lo que incide en la fragilidad y caída del pelo), promoviendo el aumento de grosor y densidad del cabello. Este procedimiento debe ser realizado al menos dos veces por semana durante varios meses.
5) Tratamientos quirúrgicos: trasplante de cabello
Existen dos formas de realizar este procedimiento:
– Extracción de unidades foliculares con tira:
En este tipo de procedimiento se trasplantan grupos de unidades foliculares (grupos de 1 a 4 pelos) de zonas donde no hay calvicie a aquellas zonas despobladas.
Este tratamiento se realiza con anestesia local en todo el cuero cabelludo. Con un escalpelo se extrae una porción con cabello y ésta se divide en grupos de cabellos. A continuación se sutura la zona del cuero cabelludo en la que se realizó la extracción y se trasplante a las zonas con calvicie.
Este procedimiento es bastante invasivo, doloroso en el post-operatorio y deja cicatrices en las zonas donde se extrae el cabello. Se suele utilizar cuando hay grandes zonas despobladas.
– Extracción de unidades foliculares:
En ese procedimiento se extraen los folículos uno por uno mediante un aparato especial. No deja cicatrices, es menos invasivo y no duele en el post-operatorio. Con frecuencia se utiliza después de que se haya realizado el procedimiento anterior.
En ambos procedimientos de trasplante capilar se utilizan pequeñas agujas, las cuales sirven para crear pequeños orificios que servirán como cobijo para los nuevos folículos.
La duración de estas operaciones es de entre 2 y 8 horas, dependiendo de la cantidad de pelo que se quiera trasplantar.
Actualmente, la técnica más utilizada es la segunda (microimplantes), con excelentes resultados a nivel estético, pues prácticamente no deja cicatrices. A su vez, existen equipos robóticos que realizan microinjertos, obteniendo también excelentes resultados.
6) Tratamientos en fase experimental:
– Plasma Rico en Paquetas:
El Plasma Rico en Plaquetas (PRP) es una opción cuya efectividad no está aún comprobada, ya que los estudios han arrojado resultados contradictorios. Los estudios que indican resultados positivos, aseguran que la densidad del cabello aumenta.
Este procedimiento consiste en extraer sangre del paciente y luego de un proceso de centrifugación de 10 minutos aprox., se inyecta con microaplicaciones en las áreas afectadas. El plasma contiene proteínas del mismo paciente, que activan los folículos pilosos y frenan la caída. El tratamiento consta de 2 a 4 sesiones cada 4 semanas.
– Células madre:
Es una alternativa que aún está en fase de desarrollo. Las células se inyectarían bajo la piel, permitiendo regenerar los folículos capilares. Los estudios realizados hasta la fecha son principalmente en animales.
¿Quieres recibir orientación respecto a qué tratamiento es idóneo para ti? No dudes en contactarte con nosotros y recibirás la atención que necesitas.